Mi vida sin mi

Si mi cuerpo fuera mitad Isabel Coixet y mitad Sarah Polley, me pregunto cómo hubiera sido mi película.

La encuesta

1. ¿Qué hago para distraerme en el trabajo?
1. llamo a todos mis amigos
2. navego por internet
3. cotilleo con unos y otros.
4. No tengo tiempo libre para distraerme

2. ¿Qué cosa no se me puede olvidar hacer un día de mi vida?
1. sacar la basura
2. escribir en el blog
3. decirle a alguien que le quieres
4. llamar a tus padres

3. Cuando suena mi móvil...
1. dejo que suene un par de veces antes de cogerlo
2. si no me apetece hablar cuelgo para que la otra persona sepa que no quiero hablar.
3. escucho mi melodía y me pongo a bailar
4. no tengo móvil

4. La última vez que follé fue...
1. esta noche
2. hace un mes
3. nunca follo sólo hago el amor
4. he perdido la libido. Está en busca y captura

5. La última que me ilusioné con alguien fue de...
1. un ex
2. un amig@
3. un compañer@ de trabajo
4. de un completo desconocid@

6. Ahora mismo odio a alguien. ¿quién es?
1. al perro de la vecina. Se caga siempre en el rellano.
2. a mi jefe. Hay que odiar a los jefes.
3. a quien está escuchando su móvil y no lo coge porque está bailando.
4. A ti, por ejemplo.

Suma tus respuestas. ¿Cuántas a, b, c y d tienes?. La solución en el próximo post.
(los atrevidos pueden especificar las respuestas)

Ella

Es necesario tocar fondo para sobrevivir y empezar una nueva vida.

"Ella se ha cansado de tirar la toalla, se va quitando poco a poco telarañas, no ha dormido esta noche pero no está cansada, no miró ningún espejo pero se siente to guapa. Hoy ella se ha puesto color en las pestañas, hoy le gusta su sonrisa no se siente una extraña, hoy sueña lo que quiere sin preocuparse por nada, hoy es una mujer que se da cuenta de su alma.

Hoy va a descubrir que el mundo es sólo para ti, que nadie puede hacerte daño, nadie puede hacerte daño, hoy va a comprender que el miedo se puede vencer con un solo portazo, hoy va a hacer reír porque tus ojos se han cansado de ser llanto, de ser llanto, hoy va a conseguir reírte hasta de ti y ver que lo has logrado.

Hoy va a ser la mujer que te dé la gana de ser, hoy te vas a querer como nadie te ha sabido querer, hoy vas a tirar p´alante que p´atrás ya tengo yo bastante una mujer valiente una mujer sonriente mira como pasa, ¡ja!, hoy no ha sido la mujer perfecta que esperaban, ha roto sin pudores la reglas marcadas, hoy ha calzado tacones para hacer sonar sus pasos, hoy sabe que su vida nunca más será un fracaso.

Hoy va a descubrir que el mundo es solo para ti, que nadie puede hacerte daño, nadie puede hacerte daño, hoy va a conquistar el cielo sin mirar lo alto que queda del suelo, hoy va a ser feliz aunque el invierno sea frío y sea largo y sea largo, hoy va a conseguir reírte hasta de ti y ver que lo has logrado." (BEBE)

El efecto de la causa

Provocar es un arte y un lujo que muchos se permiten.
Provocar con arte tiene su gracia.
Provocar con gracia tiene su arte.
¿dónde están los límites de la provocación?

Cambiando de tercio, que no de mitad, en el trabajo hay mucha contaminación acústica. Mientras en mi rincón se habla alto, otros gritan en su pequeña parcela. Cinco televisores, por poner un número, cada uno con un canal. Y sino cuando al unisono se escuchan todos.

El distanciamiento se convierte en el mejor efecto de la causa. Pero es muy peligroso. También es la mejor opción. Y sin duda toda una provocación.

Si hubiese una cámara oculta en el ascensor...
¿cómo te grabarían cuando subes solo?

Mujeres

Me gusta ese punto de debilidad que los hombres creen que las mujeres tenemos. ¡Nos sirve de tanto!
Pero más me gusta ver como lo desarrollamos ante ellos. ¡Son tan fáciles!

¡Y tan tontos...! Hoy me ha parado un policía. Venía detrás de mí en bicicleta y yo acababa de cometer una infracción como la copa de un pino.

Con cara de seriedad, muy educadamente e imponiendo su autoridad, me ha pedido los papeles. Llegaba el momento de mostrar esa debilidad.

- Perdone, no me he dado cuenta (con cara de pena y de pava)
- Sí, señorita pero usted ha girado y no ha hecho caso a la señal de tráfico.
- Lo siento, de verdad. No soy de aquí....
- ¿de dónde es usted señorita?
- De Valencia.
- Que yo sepa las señales son iguales en Valencia y en Madrid.
- Tiene toda la razón, pero yo... no sé. No volverá a ocurrir.
- Le tendría que poner un multa.
- Lo sé, lo sé...
- Bueno señorita, siga su camino y no lo vuelva a hacer.

El año pasado cuando hacía mi mudanza Donosti-Madrid, iba por la carretera y por no romper con la rutina, el coche se me estropeó. Iba lleno de cajas, de maletas, de trastos... Era domingo y no había ningún taller abierto en 100km a la redonda. El chico de la grúa llegó y, amablemente, nos portó a mi coche y a mí al taller más cercano pero cerrado.

El lunes yo empezaba en un trabajo nuevo. De repente, me dicen en el seguro que hasta el día siguiente no me pueden arreglar el coche. ¿Qué hago?

Mostrar esa debilidad femenina con la que conseguimos tantas cosas. Le di tanta pena al de la grúa, que él mismo me arregló el coche y no me pidió dinero. ¡Que le diera lo que quisiera!

En fin...¡qué bonito es conquistar a los hombres!. Son tan previsibles y manejables. No tengo palabras.

Rodando voy, rodando vengo.

¿Cómo cambiar una rueda?
1. Con el destornillador que viene en ese maravilloso kit, se quitan los tornillos de las llantas.
*no se quitan del todo, sólo se aflojan.

2. El gato. Pieza fundamental para levantar el coche. Los modernos son un poco complicados. Aunque siempre tienes la tienda de tapicería de enfrente donde el hombre amablemente te lo explicará.
*estaría bien llevar unos guantes en el coche porque te pringas como un cerdito...

3. Quitas los tornillos y sacas la rueda.

4. Colocas la nueva rueda.

5. Aprietas los tornillos. Hace falta tener fuerza.

6. Bajas el gato y ya está todo preparado para ponerte en marcha.

Ahora sólo necesitas acudir a un taller, donde probablemente te claven una pasta por una nueva rueda.

El coche dará independencia pero desde luego es un chorro continuo de dinero.
¡No puedo con la vida!

Vaya semanita

El verde es el color de la esperanza.

El verde es el color de mis ojos.

Hoy me quiero un poco más, aunque no todo lo que debería.

Fin de semana movido. 15 días (quizás un poco más) en estado catatónico, sin saber quien era yo, sin saber donde me encontraba y sin saber que quería de mi vida.

Los Urquijo me tenían absorbida y era la escapatoria perfecta de mis sentimientos. También lo fue cantar sobre la mesa de TNT. Sin duda valió la pena.

El viernes llegué tarde pero pronto me puse al ritmo de todos. Y es que nada mejor que beber para olvidar. Esta comprobado. Aunque ya sé que yo me pongo muy tonta.

La amiga de turno, me lee la cartilla. Por si no me la hubiesen leído lo suficiente durante estos quince días. Me hacéis llorar pero GRACIAS.

Un Casa Lucio que no fue mal. Prefiero los huevos estrellados del Almendro 13 pero el solomillo y la compañía, de nuevo, valieron la pena.

Del domingo hay muchas cosas que resaltar. Me gusta ser freaky, lo sé.

En esta ocasión el remedio no sé si es peor que la enfermedad. Opiniones para todos los gustos.