Rodando voy, rodando vengo.
¿Cómo cambiar una rueda?
1. Con el destornillador que viene en ese maravilloso kit, se quitan los tornillos de las llantas.
*no se quitan del todo, sólo se aflojan.
2. El gato. Pieza fundamental para levantar el coche. Los modernos son un poco complicados. Aunque siempre tienes la tienda de tapicería de enfrente donde el hombre amablemente te lo explicará.
*estaría bien llevar unos guantes en el coche porque te pringas como un cerdito...
3. Quitas los tornillos y sacas la rueda.
4. Colocas la nueva rueda.
5. Aprietas los tornillos. Hace falta tener fuerza.
6. Bajas el gato y ya está todo preparado para ponerte en marcha.
Ahora sólo necesitas acudir a un taller, donde probablemente te claven una pasta por una nueva rueda.
El coche dará independencia pero desde luego es un chorro continuo de dinero.
¡No puedo con la vida!
6 Comments:
De qué sirve la teoría si no tienes fuerza para desatornillar la rueda...
Bueno, lo que más gracia me ha hecho del post es la frase:
"siempre tienes la tienda de tapicería de enfrente donde EL HOMBRE amablemente te lo explicará".
No voy a comentar por qué... pero me ha hecho gracia.
Por cierto, lo mejor para apretar tornillos con la llave es ponerla en posición horizontal y subirse encima.
Tampoco los super-aprietes o la próxima vez los desenroscará su padre.
Y lo de que el coche es un chorro de dinero dímelo a mi, que me acaban de reventar el retrovisor lateral en la calle, así porque sí. Y el otro ya estaba jodido...
Son todo símbolos:
los tornillos que sobran o faltan en la cabecita, tener gato o no tenerlo, ver que la cosa rueda, una tapicería que necesiataría para cambir mi aspecto, tener fuerzas o sentir que te faltan.
Si pincho voy a replantearme tantas casa....
Este post tendría que llevar el siguiente título. "Homenaje a Iván". Espero que a partir de ahora nunca más le llames gilipollas. Ivan: esa chinche que es tan conveniente tener cerca. Dale un beso de mi parte.
Este post tendría que llevar el siguiente título. "Homenaje a Iván". Espero que a partir de ahora nunca más le llames gilipollas. Ivan: esa chinche que es tan conveniente tener cerca. Dale un beso de mi parte.
M.A., últimamente nos queremos más... después de la tormenta siempre llega la calma.
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